Uno de los hábitos más difíciles de dejar es el de fumar, lo cual baja de dificultad cuando se hace en pareja, afirmó un estudio presentado por EuroPrevent 2019.

 

En este estudio, se analizó el papel de apoyo que las parejas pueden tener en el abandono del hábito de fumar, por lo que se estudió a 222 fumadores actuales con el riesgo e enfermedad o con antecedentes al corazón. También, se reclutó a 99 fumadores actuales, 40 ex fumadores y a 83 personas que nunca habían fumado.

 

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Esto se debe a que la mitad de las personas con enfermedades cardiovasculares fuman, por lo que dejar de hacerlo reduce en 50 por ciento el riesgo de desarrollar problemas en el corazón y los vasos sanguíneos.

 

Para el procedimiento, las parejas asistieron a uno de los cuatro programas de cardiología preventiva durante 16 semanas, en donde se les ofrecieron diversas terapias para abandonar el tabaco, como reemplazo de nicotina con parches y chicles. Además, podían elegir la vareniclina, un medicamento con receta, en lugar de las opciones de terapia.

 

 

Los resultados mostraron que las probabilidades de dejar de fumar a las 16 semanas fueron significativamente más altas, 5.83 veces, en las personas que hicieron el intento en pareja, en comparación con aquellos que lo hicieron solos.

 

El estudio apunta que investigaciones anteriores también demostraban que los ex fumadores pueden influir positivamente en los intentos de su cónyuge para dejar de fumar, pero en ese estudio el efecto no fue estadísticamente significativo.