Dormir bien puede contribuir a que los jóvenes con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) mejoren su concentración y planifiquen y controlen sus emociones.

 

Esto explicó un estudio realizado por el Centro Médico del Hospital Infantil de Cincinnati en donde se midió la función ejecutiva en adolescentes voluntarios con TDAH después de dos ensayos separados de sueño.

 

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Para esto, los voluntarios pasaron una semana en la que su sueño se limitó a seis horas y media por noche, seguido de una semana en las que se les permitió dormir cerca de nueve horas y media.

 

En los resultados, las pruebas mostraron deficiencias significativas en todas las áreas evaluadas después de la semana de restricción del sueño en comparación con la semana de extensión del sueño.

 

“El aumento del sueño puede tener un impacto significativo en el funcionamiento académico, social y emocional de los adolescentes con TDAH y el sueño puede ser un importante objetivo futuro para futuras investigaciones”, señaló el estudio presentado en la reunión anual de la Sociedad Americana de Psicología.

 

El déficit de atención es uno de los trastornos neuroconductuales más comunes en niños y adolescentes, que se caracteriza por dificultades en la función ejecutiva, lo cual puede interferir en el rendimiento académico y las habilidades sociales.