El Inubosaki Marine Park Aquarium era un acuario japonés ubicado en la ciudad de Choshi, en la prefectura de Chiba al este de Tokio, uno que vio cerradas sus puertas a comienzo del año debido a la baja en sus visitante.
El cierre de sus instalaciones trajo un grave problema con las especies que ahí mantenía, ya que no las pudieron movilizar y decidieron abandonarlas.
Al menos 46 pingüinos, cientos de peces y reptiles, así como un delfín de nombre Honey permanecen en el acuario, solo logrando sobrevivir gracias a los exempleados que regresan periódicamente a alimentarlos.
La asociación Dolphin Project decidió documentar la triste realidad por la que viven estos animales, grabando por medio de un dron el acuario, en donde podemos ver al delfín Honey solo en su estanque, en una imagen que realmente nos rompe el corazón.
Este delfín fue capturado en 2005 en las cercanías a la ciudad portuaria de Taijii, zona que se ha vuelto famosa por la caza de delfines y por aparecer en el documental The Cove, ganador del Oscar en 2009.
Los acuarios fueron duramente acusados en esos años en participar en la caza de delfines, ya que cientos de ellos eran llevados a una cala donde algunos se mantiene vivos y se envían a los parques acuáticos, mientras otros son sacrificados.
