La ansiedad y el estrés pueden ser algunas de las respuestas emocionales que nos estén acompañando en estos días, especialmente complicados para todos nosotros por la crisis del coronavirus; y es que al igual que la piel, el cabello es un fiel reflejo de nuestro estado anímico y también puede estar sufriendo las consecuencias del estrés que está desencadenando la cuarentena.

Afortunadamente, ahora contamos con más tiempo que nunca para mimarnos y rescatar el cabello dañado. Para ello, debemos nutrirlo y repararlo intensamente con mascarillas que podemos realizar en casa con ingredientes que habitualmente forman parte de nuestro hogar.

¿Cabello Débil?

La yema de huevo aporta brillo y fuerza al cabello, mientras que el aceite de oliva nutre y aporta suavidad al instante.

Ingredientes:

  • Dos yemas de huevo
  • Aceite de oliva
  • Agua

Procedimiento:

  1. Separar las yemas de las claras de los dos huevos y reservar las yemas en un recipiente.
  2. Incorporar una taza de agua tibia y una cucharadita de aceite de oliva, y mezclar hasta formar una masa uniforme.
  3. Aplicar la mezcla en el cabello seco y dejar actuar durante 30 minutos.
  4. Pasado ese tiempo, enjuagar con agua fría.

¿Cabello sin brillo?

El limón es un gran aliado para nuestra melena. Ayuda a eliminar la excesiva grasa, aporta brillo y luminosidad, contribuye a acabar con el problema de la caspa y, además, es idóneo para frenar la pérdida del pelo. El yogur otorga suavidad y, gracias al ácido láctico, acondiciona el cabello desde la raíz hasta las puntas.

Ingredientes:

  • Dos claras de huevo
  • Zumo de limón
  • Un yogur natural

Procedimiento:

  1. Separar las claras de las yemas de los dos huevos y reservar las claras en un recipiente
  2. Mezclar un yogur natural con las dos claras de huevo y dos cucharadas de zumo de limón
  3. Aplicar en el cabello, seco o húmedo, evitando las raíces
  4. Dejar actuar durante 30 minutos y aclarar con agua fría

Con información de Hola