Cuando creíamos que Felipe Calderón irrumpiría en alguna de las conferencias mañaneras de AMLO cual Nino Canún (nomás que en lugar de ir con las rodilleras puestas, sería con los guantes), al expresidente le bastó con una disculpa del mandatario para decir “va, ahí muere”.

Luego de que AMLO acusara a Calderón de “actos de corrupción, conflicto de interés y coyotaje”, esto por irse al consejo administración de Avangrid (filial de Iberdrola, compañía multinacional de energía), tras concluir su mandato, el expresidente lanzó fuertes tuitazos en contra del mandatario… y hasta lo reto a debatir sobre energía… pero, principalmente, sobre las fuentes de ingresos de cada uno en los últimos años.

En respuesta al expresidente, ocurrió lo esperado: AMLO se echó pa’ tras… ofreciendo una disculpa al expresidente, si es que éste se sintió aludido con las acusaciones que lanzó el pasado lunes 4 de enero, en su conferencia matutina. “Entonces, para que no vuelva a pasar y que no se moleste (Calderón), que no se disguste, que le ofrezco disculpas, pero que se les pasó la mano. Eso no se puede hacer”, dijo el presidente.

¿Se les pasó la mano?, ¿a quiénes? Ahhh bueno, pues aunque ofreció disculpas y toda la cosa, AMLO reiteró su condena a las chambas que agarraron expresidentes al concluir sus administraciones. No sólo Felipe Calderón, quien se fue a una multinacional dedicada a la producción de energía… sino también Ernesto Zedillo, quien al dejar el cargo se fue a trabajar a una como asesor de una empresa que se benefició con la privatización de los ferrocarriles nacionales… uhmmm, qué coincidencia.

“No se vio bien, no es ético. Zedillo promueve la privatización de los ferrocarriles y termina su mandato y se va a trabajar de asesor a una de las empresas que se beneficiaron con la privatización de los ferrocarriles nacionales (…) Se rescata a los bancos con el Fobaproa y también trabaja en uno de los bancos rescatados”, agregó AMLO, refiriéndose a la chamba que agarró Zedillo como asesor de Citigroup y Citibank.

Pues bueno, aunque así que digan “qué chida estuvo la disculpa”, Felipe Calderón la aceptó y reiteró su disposición para dialogar sobre cualquier asunto que se le ofrezca al mandatario. Además, reiteró que siempre se ha conducido de manera ética y legal. Y fin.