Los gatos son algunas de las mascotas más populares del mundo, aunque no suelen ser muy afectivos y se les reconoce por ser animales solitarios, tienen fans por todos lados, excepto en un pequeño pueblo de Nueva Zelanda.

 

En el pueblo de Omanui, los ciudadanos se planean imponer una nueva ley, prohibir a los gatos en todo su territorio.

 

La razón se debe a que los gatos cazan tantas aves y otras criaturas que inclusive han puesto en peligro de extinción a algunas especies, por lo que han decidido actuar.

 

 

Aquellas personas que cuenten con un gato solo tendrán que colocarles un chip y realizar un registro, pero una vez que mueran se les prohibirá adquirir otro.

 

El plan es que máximo una década ya no queden gatos en el pueblo. Aunque algunos ciudadanos han mostrado su molestia por la exclusión de este animal, otros ven más importante la conservación de las especies, ya que se estima que los gatos han sido responsables de la extinción de 63 especies, algunas de ellas exclusivas de Nueva Zelanda.

 

 

Malvados gatos asesinos…